Vamos a aprender más acerca de la energía eólica marina, una alternativa que aporta numerosas ventajas con respecto a la instalación de otros sistemas de producción de energía eléctrica gracias a sus particularidades, de manera que vamos a conocer un poco mejor su funcionamiento y aquellas características que la hacen una alternativa con mucho futuro.
Qué es la energía eólica marina
Se trata de una fuente de energía renovable que nos permite obtener energía eléctrica a partir de la fuerza generada por el movimiento del viento.
La energía eólica se obtiene a partir de la utilización de aerogeneradores, y el caso de la energía eólica marina, se trataría del mismo sistema pero estando estos ubicados en alta mar.
De esta manera, se instalan parques eólicos marinos en zonas muy específicas donde las aguas no tienen profundidades excesivas, estableciendo el máximo en unos 60 m de profundidad, pero siempre lejos de las rutas de tráfico marino, fuera de espacios protegidos por su interés a nivel ecológico, y por supuesto también apartados de la costa, de manera que en la actualidad, como ejemplo, en Europa no hay ningún parque eólico marino que se encuentre a menos de 33 km de tierra.
De esta manera, observamos que se trata de un sistema que tiene un mínimo impacto en el medioambiente, ofreciendo a cambio la posibilidad de generar grandes cantidades de energía eléctrica que, tras seguir una ruta determinada, pasa desde el aerogenerador hasta la red de distribución que permite su consumo desde cualquier punto conectado a ella.
Cómo funciona la energía eólica marina
Su funcionamiento es muy simple, y lo podemos esquematizar del siguiente modo:
- El viento gira las aspas del aerogenerador.
- Mediante el buje, se transmite el movimiento a una multiplicadora que aumenta por 100 la velocidad de giro.
- El eje de la multiplicadora envía el movimiento al aerogenerador.
- La energía cinética se transforma en electricidad.
- Un convertidor pasa la corriente de continua a alterna.
- Mediante un transformador se aumenta la tensión.
- La electricidad viaja por cables submarinos a una subestación.
- En la subestación se produce el aumento de voltaje, dando lugar a una corriente de alto voltaje de más de 150 kV.
- Mediante cables submarinos, la energía se envía ahora a la red de distribución, la cual será la encargada de llevar la electricidad a los puntos de consumo.
Ventajas de los aerogeneradores marinos
Los aerogeneradores marinos cuentan con grandes ventajas con respecto a los demás sistemas de producción de energía, así como incluso en relación con los generadores que se instalan en tierra.
Algunas de las ventajas más destacadas son:
- Al encontrarse en alta mar, la fuerza del viento es mayor, lo que significa que los aerogeneradores van a producir una mayor cantidad de energía en un menor tiempo. De hecho, se calcula que pueden llegar a doblar la producción con respecto a un aerogenerador ubicado en tierra firme.
- Están apartados lo suficiente como para minimizar el impacto acústico.
- No ocupa un espacio que puede ser dedicado para otros menesteres al encontrarse en el mar.
- Permite crear parques de enormes dimensiones, sin otros límites más que aquellos que sean impuestos por las características del lugar en el que se vayan a instalar.
- Al ser instalados en lugares estratégicos, se minimizan las molestias que puedan ocasionar al transporte marítimo.
- Se trata de energía inagotable, ya que se produce a partir del viento.
- Tampoco produce impacto visual.
- No contaminan ni generan ningún tipo de residuo.
La energía eólica marina a través de aerogeneradores, es una solución que aporta grandes ventajas, aunque cabe partir de la base de que requiere una importante inversión, pero a cambio obtendremos una producción estable y que además también reduce el impacto en el medioambiente.