Las diferentes 14 tecnologías que producen energía en España batieron un récord en octubre pasado, al alcanzar la capacidad eléctrica nacional en los 106.764 MW. De esta manera, el sistema eléctrico español alcanzó niveles que jamás había tocado. Este incremento se dio, en gran parte, gracias a las energías renovables, tecnologías en la que España es líder mundial en inversión según los últimos reportes mundiales.
El sistema eléctrico español es uno de los más diversificados de todo el mundo. Prueba de ellos son los datos de Red Eléctrica, que informó cuál es la capacidad de generación instalada de cada tecnología existente en España: Hidráulica (17.083 MW), Bombeo puro (3.329 MW), Nuclear (7.117 MW), Carbón (9.683 MW), Fuel+Gas (2.447 MW), Ciclo Combinado (26.284 MW), Hidroeólica (11 MW), Eólica (24.691 MW), Solar fotovoltaica (6.544 MW), Solar térmica (2.304 MW), Térmica renovable/Otras renovables (928 MW), Térmica no renovable/Cogeneración (5.691 MW), Residuos no renovables (490 MW) y Residuos renovables (160 MW).
Si desmenuzamos la información anterior, podremos darnos cuenta que España tiene un total de 51.721 MW instalados a través de energías renovables. Si le sumamos los 3.329 MW de bombeo puro, se alcanzan los 55.00 MW. Es decir, que todas las tecnologías limpias juntas superan más de la mitad de la capacidad instalada total de todo el sistema eléctrico español. Y la tendencia nos dice que la proporción seguirá en aumento en los años siguientes.
El aporte de las energías renovables
El récord de 106.764 MW se alcanzó gracias al incremento que hubo en la capacidad instalada de generación eléctrica gracias a energías limpias.
En lo que va de 2018, se conectaron al sistema eléctrico nacional más de 3.000 MW nuevos a base de energías renovables: La energía eólica aportó 1.184 MW y la energía solar fotovoltaica se incrementó en 1.830 MW. Y no nos podemos olvidar de los 63 MW de otras tecnologías renovables.
Octubre fue espectacular para las energías “verdes”: durante este mes se añadieron 643 MW de energía eólica a la red. Esta cifra es más de la mitad de lo que se había conectado en los nueve primeros meses del año. La energía solar fotovoltaica creció su capacidad instalada en 289 MW.
Aunque todavía no existen registros oficiales de noviembre y diciembre, ya podemos asegurar que 2019 es el mejor año de instalación de energías renovables en la última década. ¿Podemos ilusionarnos con superar la marca lograda hace 11 años? Para eso, la instalación de energías renovables debería superar los 5.000 MW, una cantidad que sería récord anual.
El mundo reduce su crecimiento, pero España bate su récord
El año pasado, la inversión mundial en energía limpia (sin contar los grandes proyectos hidroeléctricos) totalizó 332.100 millones de dólares. Ese financiamiento significa un 8% menos que en 2017. Sin embargo, a contramano de la tendencia mundial, España incrementó siete veces su inversión en energías renovables al totalizar 7.800 millones de dólares para construir centrales e instalaciones con estas tecnologías verdes. De esta manera, nuestro país se ubicó en el octavo lugar del ranking mundial de países que más dinero destinaron a la generación de energía en base a recursos renovables.
Además, con el incremento del 700% en un solo año, España fue el país que más creció en inversión para energías renovables en todo el planeta. Si se lo compara con el resto de los integrantes del “top ten”, le saca una gigantesca ventaja al segundo, Holanda, que creció “apenas” el 60% (con una inversión de 5.600 millones de dólares). El podio lo completa Suecia, que con una suba del 37% y una inversión total de 5.500 millones de dólares alcanzó a colocarse en el décimo puesto de la tabla de posiciones.
El informe anual que realiza la empresa de investigación BloombergNEF (BNEF) indicó que el 2018 fue el quinto consecutivo en que la inversión en energías renovables superó la marca de los 300.000 millones en todo el mundo.
El dato que prende una luz de alarma es la caída de la inversión en los países que lideran la cantidad de dinero utilizado para desarrollar fuentes de energías renovables.
China es el país que más dinero inyectó a las energías verdes, con 75.800 millones de dólares. Casi diez veces más que España. Pero en comparación con la inversión del año anterior, el descenso fue muy marcado: retrocedió 32%.
Lo mismo ocurrió en Japón (-16%), India (-21%) y Alemania (-32%), que ocupan el tercero, cuarto y quinto puesto, respectivamente. Solamente Estados Unidos, el escolta de China con 64.200 millones de dólares, registró un aumento con respecto al 2017: creció el 12%.
Qué energías renovables crecieron más
La inversión en energía eólica aumentó un 3%, totalizando 128.600 millones. En cambio, la inversión general en energía solar decayó un 24%, lo que significó un total de 130.800 millones de dólares.
¿Cómo se explica esa drástica caída? Parte de esta reducción esconde en realidad un dato alentador. Fue muy fuerte la disminución de los costes de capital. El costo de instalación de un megavatio de capacidad fotovoltaica retrocedió 2% en 2018.
Pero también nos muestra un dato nada alentador: China enfrió el auge de la inversión en energía solar porque restringió el acceso de nuevos proyectos a su tarifa de alimentación. El resultado de esta política fue que la inversión en energía solar china cayó un 53% (40.400 millones de dólares) en el período estudiado.
Es para destacar el aumento de inversión en energía eólica marina, que registró su segundo mejor año de la historia. Esta tecnología recibió 25.700 millones de dólares, un 14% más que el año anterior