Hemos preparado un total de siete experimentos caseros de electricidad con el objetivo de ayudaros a que comprendáis mejor su funcionamiento, muy especialmente pensando en los más jóvenes de la casa para que aprendan no sólo trucos divertidos, sino también un poco más acerca de la corriente eléctrica que utilizamos cada día.
Convierte un globo en un imán de azúcar
Para este primer experimento casero tan sólo vamos a necesitar un poco de azúcar, un globo y un trapo a ser posible de algodón.
Lo que vamos a hacer es cargar negativamente el globo para que atraiga al azúcar, el cual tiene energía positiva.
Para ello vamos a empezar inflando el globo con aire, y una vez hecho, lo frotaremos con el trapo de algodón, gracias a lo cual lo cargaremos negativamente.
Vertemos un poco de azúcar sobre una superficie, y acercamos el globo con lo que observaremos que atraerá los granos de azúcar con mucha facilidad.
Crea un circuito eléctrico con la energía de un limón
Este es uno de los experimentos caseros más sencillos, puesto que no necesitamos prácticamente nada para su realización más que un limón, una moneda, dos cables en cuyos extremos haya pinzas de cocodrilo y una bombilla LED.
Lo único que tenemos que hacer es clavar el tornillo y la moneda en el limón, poniendo cada uno de ellos en un extremo, y a continuación utilizamos los cables para unir el tornillo a una de las patitas del LED y la moneda con el segundo cable a la otra patita, con lo que observaremos que al instante se enciende.
Os recordamos que en este truco hemos utilizado una bombilla LED ya que el limón genera poca energía, por lo que es la forma más fácil de hacer el experimento, pero si utilizamos varios limones y los conectamos en serie mediante cables con pinza de cocodrilo, es decir, el tornillo de un limón con la moneda del siguiente, podemos incluso llegar a alimentar calculadoras y otros aparatos de mayor consumo.
Descubriendo la conductividad del agua salada
Para este experimento casero necesitamos un recipiente, agua, sal, dos palitos de helado, cinta aislante, papel de aluminio, tres cables con pinzas de cocodrilo, un portapilas que permita introducir dos pilas AA y un pequeño timbre de los destinados a circuitos y pequeñas instalaciones (también lo podemos sustituir por un LED).
Lo que vamos a hacer es envolver los dos palitos de helado con el papel de aluminio y fijamos con la cinta aislante.
Ahora colocamos las pilas en el portapilas y llenamos el recipiente de agua con una buena cantidad de sal, removiendo para que se disuelva un poco.
Conectamos uno de los cables con pinza de cocodrilo a uno de los polos del timbre, y el otro extremo a uno de los polos del portapilas.
Cogemos otro cable y conectamos una pinza al polo libre del timbre y la otra a uno de los palitos de helado.
Con el tercer cable conectamos el polo libre del portapilas al otro palito de helado.
Ya no nos queda más que introducir los dos palitos dentro del agua con sal y veremos que el timbre empieza a sonar, lo que demuestra que el agua está actuando como conductor.
Generamos electricidad estática con los experimentos caseros
Para este truco vamos a necesitar un trozo de alambre, un tarro de vidrio, un tubo de PVC, un trapo de algodón y unos trocitos de papel de aluminio.
Doblamos el alambre en forma de U y a su vez doblamos de nuevo los extremos para que lo podamos sujetar tal y como podemos observar en la imagen, consiguiendo que se sostenga en el borde del tarro pero sin tocar su parte interior.
Introducimos unas pequeñas cintas de papel de aluminio en la parte central, que queden colgando en el centro del tarro.
Ahora no nos queda más que frotar el tubo de PVC con el trapo de algodón, de manera que, cuando acerquemos el tubo al exterior del tarro, observaremos que las tiras de aluminio tenderán a ir hacia donde esté dicho tubo.
Las bolitas de aluminio que escapan
Este es otro de experimento interesante para el cual vamos a necesitar un plato de plástico desechable, papel de aluminio, un trapo de algodón y bolitas de poliestireno.
Lo que haremos será cortar pequeños trozos de papel de aluminio para envolver varias bolitas de poliestireno, las cuales tendrán carga positiva.
El siguiente paso será cargar negativamente el plato, para lo cual frotaremos con el trapo de algodón el mismo.
Ahora ya podemos echar las bolitas dentro del plato, las cuales se sentirán atraídas por él, y curiosamente, cuando acerquemos un dedo a cualquiera de las bolitas, saldrá disparada, ya que nosotros también tendremos carga positiva, pero no llegaran a salir del plato debido a que al ser de carga negativa, en todo momento las bolitas serán atraídas por el mismo plato.
Los polos opuestos se atraen
Este es otro de los experimentos caseros que os queremos enseñar, y para llevarlo a cabo vamos a necesitar agua jabonosa, un plato, una pajita, un trapo de algodón y un tubo de PVC.
Verteremos el agua con jabón en el plato y ayudados por la pajita haremos una pequeña pompa.
Dicha pompa va a tener carga positiva, por lo que vamos a cargar de electrones el tubo de PVC, para lo cual frotaremos con el trapo de algodón.
Ahora la pompa será de carga positiva y el tubo de PVC de carga negativa, por lo que si acercamos el tubo a la pompa, veremos que esta se desplaza hacia el lugar al que movamos el tubo.
Polos con la misma carga se repelen en este experimento casero
Para hacer el último de los experimentos caseros que os proponemos, tan sólo vamos a necesitar un hilo, un trapo de algodón y dos globos.
Vamos a demostrar que los polos opuestos se atraen, y para ello inflaremos los globos y los ataremos uno a cada extremo del hilo.
Ahora los colgamos de manera que estén cerca el uno del otro pero con una ligera separación, evitando que se toquen.
Por defecto, ambos globos tendrán carga positiva, pero que vamos a hacer es frotar con el trapo de algodón uno de los globos, de manera que lo cargaremos negativamente.
Lo volvemos a soltar y observaremos que, aunque existía una pequeña separación entre ambos globos, ahora tenderán a estar unidos, ya que cada uno tiene una carga diferente.
Si ahora pasamos a frotar el segundo globo, observaremos que, al tener los dos carga negativa, se repelen, por lo que tenderán a separarse.
Con estos experimentos caseros, a partir de ahora os resultará mucho más fácil entender las cargas y el funcionamiento de la electricidad.